En Ameca: regidores desafían convocatorias y logran sesionar

El cabildo de Ameca vivió una sesión marcada por tensiones, reclamos y falta de acuerdos. Tras las ausencias de octubre y los constantes desacuerdos, el ayuntamiento enfrenta una crisis política evidenciando una posible fractura institucional.

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Ameca, Jalisco.— 4 de noviembre de 2025

El Ayuntamiento de Ameca atraviesa una crisis política que se ha hecho cada vez más evidente en sus recientes sesiones de cabildo. La reunión del pasado 31 de octubre, que logró finalmente celebrarse tras dos intentos fallidos por falta de quórum, expuso la fractura interna del gobierno municipal, el desgaste entre regidores y la dificultad de concretar acuerdos en temas clave para la administración.

La sesión, que se extendió durante varias horas, fue el resultado de una tensa espera tras los hechos del 17 y 18 de octubre, cuando varios integrantes del cuerpo edilicio no acudieron a las convocatorias de la presidencia municipal, dejando sin efecto las sesiones previstas para esos días. Desde entonces, la relación política entre las distintas fracciones del cabildo se ha deteriorado, y la gobernabilidad del municipio se encuentra en un punto crítico.

Sesión entre reproches y reclamos: el cabildo que no logra avanzar

El 31 de octubre finalmente se logró reunir el quórum necesario para sesionar. Sin embargo, lejos de significar un avance, el encuentro se convirtió en una larga jornada de debates, intervenciones cruzadas y reproches políticos.
La presidenta municipal trató de mantener el orden, pero la tensión entre los bloques se hizo evidente: interrupciones constantes, recordatorios de sesiones previas, exigencias sobre procedimientos y desacuerdos sobre el rumbo de la administración marcaron el tono de la reunión.

La sesión comenzó con los puntos pendientes de la agenda anterior, muchos de ellos acumulados por las suspensiones previas.
Regidores solicitaron revisar el cumplimiento de acuerdos anteriores, reclamando la falta de informes del Órgano Interno de Control y la lentitud en la entrega de dictámenes de comisión.
El ambiente fue áspero, con alusiones indirectas sobre responsabilidades políticas y acusaciones de falta de transparencia.

Convenio con Derechos Humanos: acuerdo rápido entre la tensión

El primer punto aprobado fue el convenio con la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) para instalar una oficina en el Centro Integral para el Bienestar de las Mujeres y sus Familias.
La votación fue unánime, pero las intervenciones reflejaron la desconfianza con que se toman las decisiones: varios regidores solicitaron que el documento se analice a fondo en la siguiente sesión para precisar los compromisos legales y financieros del municipio.

Aunque la presidenta celebró el acuerdo como un paso positivo, la conversación se desvió pronto hacia reclamos sobre la manera en que se integran los puntos a la orden del día. Fue el primer indicio de que el ánimo político seguía lejos de la conciliación.

Programa de vivienda CONAVI: apoyo dividido y temor a perder recursos

Uno de los temas centrales de la sesión fue la adhesión de Ameca al Programa Federal de Vivienda para el Bienestar, impulsado por la CONAVI.
La presidenta municipal expuso que el proyecto busca beneficiar a familias con bajos ingresos y que Ameca no ha tenido desarrollo de vivienda social desde 2008. Solicitó la aprobación del cabildo para continuar con los trámites ante instancias federales y evitar perder el recurso proyectado para 2025.

Pese a la urgencia planteada, regidores de oposición insistieron en que el acuerdo debía enviarse a comisión antes de aprobarse, argumentando que era necesario revisar la desincorporación de un terreno municipal y el cambio de uso de suelo.
Las posturas chocaron: mientras un bloque pedía celeridad para no frenar apoyos sociales, otro exigía cumplimiento estricto de la ley. Finalmente, el punto se aprobó de forma parcial: el cabildo respaldó la intención de participación, pero remitió los aspectos técnicos a comisión.

La presidenta cerró el debate advirtiendo que los retrasos podrían hacer que Ameca pierda oportunidades de inversión federal, mientras varios regidores reclamaron que no se siguió el proceso administrativo correcto. La discusión terminó sin consenso total, reflejando una vez más la parálisis que vive el ayuntamiento.

Basificaciones irregulares: reclamos sin respuesta

Otro de los momentos más tensos de la jornada fue el reclamo del síndico municipal sobre la falta de avances en la investigación de las basificaciones laborales otorgadas en la administración anterior (2021–2024).
El tema, aprobado por el cabildo hace más de un año, sigue sin informe del Órgano Interno de Control.

“Han pasado más de trece meses y no se nos ha presentado un solo documento que acredite avances”, insistió el síndico, subrayando que el municipio enfrenta demandas laborales y necesita sustentar su defensa legal.

La presidenta municipal coincidió en la necesidad de atender el asunto, pero pidió que la sindicatura y el área jurídica trabajen de la mano. El debate se extendió en medio de acusaciones sobre omisiones, falta de coordinación y versiones encontradas sobre quién debe presentar el informe.
Aunque el punto se aprobó por unanimidad, el intercambio dejó ver la desconfianza interna y la falta de control administrativo en áreas clave.

Geolocalización de maquinaria: tecnología en disputa

El cabildo también discutió una propuesta para instalar sistemas de geolocalización satelital (GPS) en la maquinaria municipal, con el fin de vigilar su uso y prevenir robos o desvíos.
El síndico defendió la medida como una herramienta de transparencia, mientras varios regidores cuestionaron los costos y la pertinencia de la inversión.
Al final, el proyecto se envió a la Comisión de Hacienda para revisión, aunque el debate dejó entrever las distintas prioridades políticas dentro del gobierno.

Compensaciones a agentes municipales: propuesta sin respaldo financiero

El regidor Sergio Hernández Torres presentó una iniciativa para otorgar compensaciones mensuales a los agentes municipales, argumentando que muchos de ellos trabajan sin recursos para cubrir sus traslados.
La propuesta fue bien recibida en lo general, pero la tesorería informó que no existe partida presupuestal que lo respalde.
El punto fue turnado a comisión, en medio de llamados al respeto mutuo y quejas sobre la falta de coordinación previa entre regidores y dependencias.

Campaña de mastografías: el único consenso

La regidora Verónica Judith López Díaz propuso una campaña permanente y gratuita de mastografías para detección oportuna de cáncer de mama.
El punto fue aprobado por unanimidad, siendo el único que logró unir a todas las fracciones.
La Dirección de Salud informó que ya se han realizado campañas periódicas con buenos resultados, y se acordó fortalecerlas de manera permanente.

Contexto: las sesiones suspendidas de octubre y el origen del conflicto

El clima de tensión del 31 de octubre tiene su origen en los intentos fallidos de sesionar los días 17 y 18 de octubre, cuando varios regidores, incluido el síndico, no acudieron a las convocatorias de la presidencia.
De los trece ediles, solo siete respondieron al pase de lista. Dos regidoras justificaron su ausencia por motivos personales y de salud, mientras el resto no presentó justificación formal.
La presidenta Marta Catalina Loza Castro calificó el ausentismo como una maniobra política y advirtió que la Ley de Gobierno Municipal de Jalisco contempla sanciones por faltas injustificadas, incluyendo descuentos en dietas y posibles procedimientos administrativos.

Las ausencias fueron interpretadas como un mensaje político en medio de diferencias crecientes por la conducción del ayuntamiento. Desde entonces, el cabildo amequense opera en medio de desconfianza, retrasos y conflictos internos.

Un cabildo sin acuerdos y un municipio detenido

La sesión del 31 de octubre reflejó el cansancio político de una administración dividida. Entre reclamos, acusaciones veladas y llamados al orden, el cabildo mostró su fractura: proyectos sociales detenidos, comisiones saturadas y una agenda institucional que avanza a paso lento.

En la calle, la ciudadanía percibe el estancamiento. Comerciantes y vecinos expresan preocupación por la falta de resultados concretos y la constante confrontación política. “Mientras ellos discuten, los problemas siguen iguales”, comentó una vecina del centro histórico.

Analistas locales señalan que si el ayuntamiento no recompone su dinámica de trabajo, Ameca podría enfrentar un cierre de año complicado: recursos federales en riesgo, obras sin ejecutar y pérdida de credibilidad institucional.