México / Jueves 19 de junio del 2025.- La violencia y la delincuencia que azotan al estado de Sinaloa han dejado un impacto devastador no sólo en las personas, sino también en miles de animales que se han convertido en víctimas inocentes de la guerra entre los distintos grupos del Cártel de Sinaloa.
El caso más reciente se presentó el pasado jueves 12 de junio en el sector Villa Bonita de Culiacán, donde 11 perros quedaron desamparados tras el asesinato de su cuidador.
Esta problemática se suma al difícil panorama que vivió el Santuario de Ostok, un reconocido centro de resguardo animal que, debido a la violencia, se vio obligado a desalojar sus instalaciones en Culiacán, donde más de 700 animales fueron trasladados en una caravana de más de 200 kilómetros hacia Mazatlán.
Rescate urgente de perros abandonados tras asesinato de su cuidador en Villa Bonita
Ocho perros en grave estado de salud fueron trasladados a la clínica Chapultepets Congreso para recibir atención médica, mientras la comunidad busca hogares y apoyo para protegerlos del desalojo y abandono.(Instagram/@fundacion_baltoytogo)
El martes 17 de junio, a través de un mensaje en redes sociales, vecinos informaron que uno de los once perros, una canina llamada Esperanza, fue atropellada y trasladada por ellos mismos a la clínica veterinaria Chapultepets Congreso, donde recibió atención médica de emergencia.
Por otra parte, mencionaron que dos de los canes fueron adoptados por personas de la comunidad, pero ocho permanecen en grave riesgo y sin protección.
Además, advirtieron que la vivienda donde los caninos habitaban era rentada y que, ante un desalojo inminente por parte de las autoridades, los animales serían obligados a salir a la calle.
Por ello, hicieron un llamado urgente para encontrarles un hogar, solicitando el apoyo de la comunidad: “Si alguien conoce alguna fundación que pueda ayudarlos, por favor manden un mensaje ”, expresaron en redes sociales.
En respuesta a la situación, la Fundación Balto y Togo, en coordinación con la Unidad de Protección Animal de Culiacán, acudieron al lugar para rescatar a los perros y brindarles la atención necesaria. Los ocho animales que permanecían en la vivienda fueron trasladados a la clínica Chapultepets Congreso, donde recibieron atención médica debido a sus graves problemas de salud.
Esperanza y su estado de salud crítico
Esperanza recibió atención médica tras ser herida por una bala y atropellada durante un ataque armado en Villa Bonita; sufrió daños severos en hígado y columna, lo que le impedirá caminar y requerirá silla de ruedas para el resto de su vida. (Instagram/@fundacion_baltoytogo)
La canina fue alcanzada por una bala durante el ataque armado en Villa Bonita y posteriormente atropellada por los agresores que huían del lugar, según reportaron los vecinos que se encontraban cerca del lugar de los hechos para la Fundación Balto y Togo.
La presidenta de la fundación, Marisela Castaños Pérez, y el paramédico Gilberto Cuén, que la atendió, reportaron que el pronóstico es grave pues “la perrita sufrió daños severos en el hígado y en la columna vertebral, por lo que se espera que no pueda volver a caminar y necesite una silla de ruedas para el resto de su vida.”
Además de la lesión causada por la bala, la perrita presentó un golpe de calor con una temperatura corporal superior a los 40 grados, lo que complicó aún más su estado. A pesar de la atención recibida, su recuperación será larga y requerirá cuidados especializados para mejorar su calidad de vida.
El caso del Santuario de Ostok y los 700 animales desplazados
Tigres, elefantes y otros animales exóticos viajan en caravana rumbo a Mazatlán, tras ser evacuados de Culiacán por la inseguridad y ataques del crimen organizado. (AP Foto/Félix Márquez)
Durante el último mes, el centro de resguardo se vio forzado a desalojar sus instalaciones en Culiacán y trasladar a 700 animales hacia Mazatlán, en una caravana de más de 200 kilómetros.
Entre los animales rescatados se encontraban tigres, monos, jaguares, elefantes y leones, todos ellos reubicados para protegerlos del creciente clima de inseguridad generado por el crimen organizado en la región.
La decisión se tomó tras una serie de ataques armados, el robo de vehículos de rescate y la imposibilidad de acceder a atención veterinaria especializada, pues incluso los médicos se negaban a ingresar a la ciudad por temor.
Infobae
