En México, además de conmemorar la Epifanía de los Reyes Magos, el 6 de enero se celebra a una de las profesiones más nobles y esenciales para el bienestar de la sociedad: la enfermería. Esta fecha reconoce el trabajo de enfermeras y enfermeros que, con su arduo esfuerzo y humanismo, están al servicio de la salud pública, cuidando la vida de aquellos que no pueden cuidar de sí mismos debido a una enfermedad, accidente o condición crónica.
La celebración tiene sus raíces en 1931, cuando el entonces presidente Pascual Ortiz Rubio firmó un decreto que oficializó el Día de la Enfermera en México, para rendir homenaje a quienes desempeñan un rol crucial en el sistema de salud del país. La fecha también busca destacar la labor silenciosa y muchas veces desconocida de estos profesionales que, a menudo, pasan horas al cuidado de los pacientes, siendo los principales proveedores de apoyo emocional y físico en hospitales y centros de salud.
Hoy en día, se llevan a cabo ceremonias, actividades y reconocimientos en hospitales, clínicas y universidades para agradecer y honrar a este grupo vital de profesionales, cuyo trabajo es fundamental en la atención sanitaria. Además, esta fecha busca recordar la importancia de seguir fortaleciendo la educación y formación de los nuevos enfermeros y enfermeras, quienes continúan haciendo una diferencia en la vida de miles de mexicanos.
