Örebro, Suecia. Un tiroteo registrado este martes en el centro educativo para adultos Campus Risbergska, ubicado en Örebro, al oeste de Estocolmo, ha dejado un saldo de al menos diez personas fallecidas, entre ellas el presunto autor de los disparos. La Policía sueca informó que el operativo sigue en curso y la situación aún no está completamente esclarecida.
“Varias personas también han resultado heridas por disparos y una de ellas es quien sospechamos puede ser el autor”, declaró en rueda de prensa Roberto Eid Forest, jefe de la Policía de Örebro. La televisión pública sueca, basándose en información policial, reportó un saldo de diez muertos y al menos quince heridos. Según la agencia de noticias TT, el responsable de los disparos se suicidó tras perpetrar el ataque.
Las autoridades han desmentido informaciones previas que sugerían que algún agente de policía habría resultado herido en el suceso. En cuanto a los hospitalizados, se ha informado que cinco personas fueron ingresadas; de ellas, cuatro han sido intervenidas quirúrgicamente: dos están estables, una permanece en estado grave y otra ha sufrido heridas leves.
El jefe policial Eid Forest aseguró que el peligro ha pasado y no se esperan nuevos incidentes, aunque evitó especular sobre los motivos del atacante o la posibilidad de que existan otros involucrados. Mientras tanto, la Policía ha iniciado la evacuación de varias escuelas aledañas donde profesores y alumnos habían sido retenidos por seguridad, aunque el perímetro de seguridad en la zona sigue activo.
Las fuerzas del orden recibieron el aviso del tiroteo a las 13:30 horas (hora local) y han indicado que se investigan delitos de intento de asesinato, incendio y graves infracciones con armas. Además, un número indeterminado de alumnos y docentes continúan resguardados dentro del recinto educativo hasta que finalice el operativo.
El hospital de Örebro ha habilitado áreas especiales en urgencias y cuidados intensivos para atender a los afectados, según informó la emisora Radio de Suecia.
Campus Risbergska, un centro de educación para adultos, tenía menos alumnos de lo habitual en el momento del tiroteo, ya que muchos habían salido tras finalizar sus exámenes, según declaró la docente Lena Warenmark a la televisión pública SVT.
El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, lamentó el ataque y expresó su solidaridad con las víctimas y sus familias. “Hoy es un día muy doloroso para toda Suecia. Mis pensamientos están con todos aquellos cuya jornada lectiva fue afectada por el terror”, declaró a la agencia TT.
La Policía local ha convocado una rueda de prensa para ofrecer más detalles sobre la investigación en curso.