La tarde del lunes 27 de enero se reportaron disparos en la frontera entre México y Estados Unidos, presuntamente dirigidos a agentes de la Patrulla Fronteriza. El incidente tuvo lugar en el Condado de Starr, en el área de Fronton, Texas.
Chris Olivarez, portavoz del Departamento de Seguridad Pública de Texas, señaló que los disparos fueron realizados por miembros de un “cártel mexicano”, aunque no especificó cuál. Según Olivarez, el Departamento de Seguridad Pública de Texas respondió rápidamente para apoyar a la Patrulla Fronteriza tras el ataque.
A través de su cuenta en X, Olivarez agregó que los operadores de drones del Departamento de Seguridad Pública identificaron a los agresores mientras huían de México, presuntamente intentando cruzar la frontera de forma ilegal.